Usar el marco de los servicios públicos para garantizar el derecho de niños, niñas y adolescentes al cuidado en Chile

Usar el marco de los servicios públicos para garantizar el derecho de niños, niñas y adolescentes al cuidado en chile: la propuesta de GI-ESCR y socios al comité de derechos del niño

Al amparo de la 90a sesión del Comité de Derechos del Niño, en la que estará concluyendo el sexto y séptimo reporte periódico de Chile, GI-ESCR y la Internacional de Servicios Públicos enviaron un informe para destacar las formas en que los estándares establecidos por el Manifiesto Global por los Servicios Públicos pueden ser útiles para operacionalizar e impulsar servicios públicos de cuidado renovados que respeten, protejan y garanticen los derechos de niños, niñas y adolescentes.

La presentación señala que estos principios pueden lograr una mejor protección de los derechos sociales de los niños a través de la incorporación de las perspectivas de los niños, niñas y adolescentes en el diseño, implementación, monitoreo y evaluación de los servicios públicos de cuidado y en la disponibilidad de recursos para sostenerlos. Estos también pueden proveer de un marco comprensivo que engloba varias de las preocupaciones del Comité incluidas en la lista de cuestiones previas, tales como el rol del sector privado en la protección de los derechos de los niños, el respeto por la opinión de los niños, el apoyo a los padres de hijos sujetos a cuidado alternativo,el monitoreo permanente de la calidad del cuidado y los estándares de servicio en diferentes sectores como la educación, la salud y la seguridad social, entre otros.

El informe también sugiere soluciones. La incorporación de este marco requiere de la promoción y universalización del concepto de servicios públicos de cuidado de calidad, así como también de la reivindicación de su naturaleza pública, restaurando así el deber y responsabilidad principal del Estado en su provisión. Por su parte, esto también exige garantizar que existen recursos suficientes para cubrir estos servicios de calidad. 

Adelantándose a estos desafíos, la presentación también apunta hacia otros instrumentos que pueden ser útiles en este esfuerzo. Por ejemplo, los Principios de Derechos Humanos en la Política Fiscal pueden entregar herramientas útiles para presupuestar con enfoque de derechos humanos, mientras que el Manifiesto de Cuidados provee de estrategias amplias para reconstruir la organización social del cuidado.

El documento termina con algunas sugerencias para las observaciones finales del Comité, entre las que se incluyen la consideración del concepto de Servicios Públicos de Cuidado para abordar los desafíos enfrentados por el nuevo Servicio Nacional de Protección Especializada a la Niñez y Adolescencia (Mejor Niñez), la inclusión de los estándares de servicio público reflejados en el Manifiesto Global; la restauración de la obligación y responsabilidad principal del Estado de proveer servicios públicos de cuidado, revirtiendo así la comercialización de este tipo de servicios; y usar los Principios de Derechos Humanos en la Política Fiscal para la correcta asignación de recursos orientada al cumplimiento de los derechos de niños, niñas y adolescentes en línea con un enfoque de derechos humanos.