GI-ESCR trae la experiencia chilena de resistencia feminista al congreso anual de la asociación internacional para la economia feminista 

El 25 de junio de 2021, la Directora Ejecutiva de GI-ESCR, Magdalena Sepúlveda, participó en el panel de clausura del Congreso Anual de Economía Feminista organizado por la International Association for Feminist Economics (IAFFE), aportando la experiencia chilena de resistencia feminista a la conferencia, desde la experiencia de un actor clave y reconocido en el campo. El tema de la Congreso Anual de la IAFFE de este año fue Sostenibilidad de la vida: retos en un contexto de crisis multidimensional.

La presentación de GI-ESCR se centró en la experiencia organizativa en Chile que condujo al proceso constituyente, con especial énfasis en la relación entre la resistencia feminista y la justicia económica.

SOSTENIBILIDAD DE LA VIDA

Para la IAFFE, sostener la vida requiere de la confluencia de sistemas económicos y políticos inclusivos y resilientes, así como de la sostenibilidad del medio ambiente. Esta visión se construye desde un diagnóstico que evidencia el resurgimiento de gobiernos reaccionarios, con sistemas económicos y políticos incapaces de satisfacer las necesidades humanas y de enfrentar la fragilidad de los ecosistemas, junto con sociedades cada vez más caracterizadas por tensiones de raza, etnia, religión, nacionalidad, género e identidad sexual que fomentan las divisiones.

Por lo anterior, la IAFFE ha buscado lograr un entendimiento más integrado del bienestar, en el que los ámbitos productivo y reproductivo sean visibilizados y valorados, incorporando perspectivas provenientes de otras disciplinas en esta reflexión.

En este contexto, la colaboración de GI-ESCR, trabajando con organizaciones feministas globales y con una experiencia larga en la resistencia feminista, ha sido clave para entender los impactos de la economía en la vida de las mujeres del sur global desde un marco de derechos sociales.

APORTACIÓN DE GI-ESCR SOBRE EL PROCESO CONSTITUYENTE Y LOS DERECHOS SOCIALES

En su intervención, Magdalena resaltó el rol clave que los movimientos feministas han tenido históricamente en el reconocimiento y expansión de los derechos sociales, políticos y económicos, reconociendo además el origen común que tienen los movimientos ciudadanos que exigen derechos sociales y los movimientos feministas contemporáneos en Chile.

Nuestra Directora remontó la relevancia pública de los derechos sociales en el discurso social chileno a episodios como las marchas estudiantiles del 2006 y 2011, las protestas por mejores pensiones y los movimientos contra la construcción de represas y la protección del medio ambiente. Todos los que tuvieron una articulación en lenguaje de derechos en el proceso de discusión constitucional gatillado por el gobierno de Michelle Bachelet en 2017.

La representante de GI-ESCR resaltó también que en la actualidad, el eje central de todos estos movimientos es el rechazo a la Constitución de Pinochet, la que representa la adopción del neoliberalismo como el modelo económico del país, cuyo fin trae esperanzas y expectativas de poner fin a las desigualdades desenfrenadas que se viven desde entonces.

RESISTENCIA FEMINISTA: LA EXPERIENCIA DE CHILE

En particular, Magdalena trazó el surgimiento de los movimientos feministas en Chile a la década de los ‘30s, reapareciendo con fuerza en períodos específicos como la dictación de la ley de divorcio y la ley de acoso sexual. Sin embargo, identificó dos eventos históricos que marcaron los orígenes de una resistencia feminista más amplia y organizada: la elección de la primera mujer presidenta del país y la articulación de los movimientos sociales alrededor de los derechos económicos, sociales, culturales y ambientales. Como primera expresión de esta resistencia feminista autónoma y escindida de otros movimientos, Magdalena se refirió a las marchas por los derechos sexuales y reproductivos que entrelazaron tanto la igualdad de género como los derechos sociales.

Señaló que a partir de entonces:

Los movimientos feministas sólo han crecido, tomando nuevos ribetes e incluso articulando movimientos de solidaridad feminista internacional, a través de la ocupación del espacio público, del uso de campañas públicas y del lenguaje artístico para interpretar el sentir de las mujeres de Chile y otros países y abogar por la protección de sus derechos.

La Directora Ejecutiva resaltó que uno de los mayores triunfos de esta resistencia ha sido la incorporación de la paridad en la elección de quienes representarán a Chile en la Convención Constitucional que inicia sus actividades el próximo 4 de julio.

Magdalena finalizó su exposición resaltando que:

En el trabajo de este organismo se juegan importantes cartas, como la transformación del sistema económico y social, la visibilización del aporte de las mujeres a los sectores económicos y productivos y la transversalización del enfoque de género en los derechos económicos, sociales, culturales y ambientales. Estos desafíos, explicó, demuestran la relevancia de Chile como país pivote para la región y el sur global en relación tanto al reconocimiento y regulación del cuidado y el trabajo doméstico, como a la protección de la naturaleza del extractivismo desatado que venía viviendo durante las últimas décadas.

CONGRESO ANUAL DE LA AEFFE 2021: “SOSTENIBILIDAD DE LA VIDA: RETOS EN UN CONTEXTO DE CRISIS MULTIDIMENSIONAL”

Sostener la vida requiere de la confluencia de sistemas económicos y políticos inclusivos y resilientes, así como de la sostenibilidad del medio ambiente. La economía feminista ofrece perspectivas intelectuales y metodológicas para analizar el sostenimiento de la vida de forma integral. Actualmente, nuestros sistemas económicos y políticos son incapaces de satisfacer las necesidades humanas y de enfrentar, a la vez, la fragilidad de los ecosistemas, particularmente en el marco del resurgimiento de gobiernos reaccionarios. Nuestras sociedades se caracterizan cada vez más por tensiones de raza, etnia, religión, nacionalidad, género e identidad sexual que fomentan las divisiones; y las fronteras son cada vez más excluyentes, con barreras de todo tipo. En este contexto, las mujeres enfrentan amenazas a sus posibilidades de generar ingresos y a su integridad física. La pandemia global solamente ha exacerbado estos retos.

Frente a estos retos, se requieren nuevas visiones económicas y metodológicas dentro de las cuales, las perspectivas feministas son esenciales. La economía feminista se ha caracterizado por ir más allá de las simplificaciones imbuidas en las categorías, métodos y modelos del pensamiento económico convencional, incorporando también en esta reflexión visiones provenientes de otras disciplinas. Desde nuestra perspectiva, la organización de la economía incluye actividades, interacciones, transacciones y relaciones que ocurren en los hogares, empresas, comunidades y el estado - como categorías socialmente construidas - así como dentro y fuera de los mercados. Por ello buscamos un entendimiento más integrado del bienestar, en el que los ámbitos productivo y reproductivo son visibilizados y valorados. El Congreso de la Asociación Internacional para la Economía Feminista – IAFFE - de 2021 será un foro de debate académico que reconoce el pluralismo metodológico del campo de conocimiento de la economía en su definición más amplia, como sistema y como disciplina. En este sentido, acogemos y damos la bienvenida a investigaciones y experiencias que apliquen la perspectiva feminista en los ámbitos macro, meso y micro de la economía, así como en las problemáticas económicas locales y globales. Les invitamos a acompañarnos en este congreso virtual, auspiciado por el Comité Local de Quito.

Para más información sobre el Congreso, visita el sitio web de la International Association for Feminist Economics.

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